¡LO QUE NECESITAS SABER!
Todos los seres vivos usan glucosa como fuente de energía. En los vertebrados es fundamental que los niveles de glucosa en la sangre sean consistentes. Las fluctuaciones pequeñas de la glicemia es algo normal, pero si la concentración de glucosa en la sangre es demasiado alta (hiperglicemia), podría resultar en un coma. Si la concentración de glucosa en la sangre es demasiado baja (hipoglicemia), la persona podría experimentar convulsiones, entrar en coma o morir. En los seres humanos, los niveles hormonales ayudan a regular la concentración de glucosa en la sangre y nos mantienen en homeostasis.
